Los gastos del día a día, los clientes que se demoran en el pago, el alquiler de la oficina, el IVA, los imprevistos... La vida de un autónomo se convierte en muchas ocasiones en una especie de mito de Sísifo perpetuo en la que, cuando algo parece solucionado, aparece otra nueva piedra que sortear. Los trabajadores por cuenta propia asumen desde el primer momento una serie de gastos y riesgos que no tendrían en caso de ser asalariados. Un informe realizado por ATA, la Asociación de Trabajadores autónomos, revela además que un 28% de los autónomos trabaja 11 horas al día o más y que uno de cada cinco lo hace los siete días de la semana.

Trabajadores autónomos… ¿Os suena? ¿Sois de los que a fin de mes os veis con la soga al cuello, financieramente hablando? ¿Os sentís incapaces de ahorrar pese a que trabajáis más horas de las que puede contabilizar un reloj? Pues debéis saber que todo tiene solución. Os vamos a mostrar cómo, a través de cinco sencillas medidas, podéis lograr una buena gestión financiera y ahorrar a fin de mes. ¡Tomad nota!

1.-Ahorro en la factura eléctrica y telefónica

Como autónomos seguro que os pasáis todo el día pegados al teléfono, lo que puede disparar la factura si no se tiene una tarifa plana. Dedicad una mañana a hacer una comparativa con las diferentes operadoras para ver qué descuentos os ofrecen. Resaltad vuestra condición de autónomo ya que muchas tienen planes especiales para este colectivo. Con la factura eléctrica sucede lo mismo (a no ser que os alumbréis con velas), pensad en cambiar la potencia contratada acorde a las necesidades del negocio. Muchas veces se tiene contratada una potencia para abastecer a una central nuclear y no somos el señor Burns. Y recordad, invertir en iluminación LED también es una fórmula de ahorro a largo plazo.

2.- Trabajar desde casa

Siempre que el negocio lo permita, montar una oficina en casa puede suponer un gran ahorro. De esta forma evitamos pagar el alquiler de un local y los gastos de mantenimiento y además nos ahorramos los desplazamientos. Otra ventaja de trabajar desde casa es que podemos deducirnos algunos gastos como el IBI, el seguro de hogar, el consumo de electricidad, el ADSL, eso sí, todo en función del porcentaje de vivienda destinado a la actividad profesional.

3.-Contratar un espacio de coworking

Los centros de coworking también gozan de mucha popularidad entre los autónomos por las ventajas que representan. Según ProWorkSpaces, la patronal de centros de coworking, seis de cada diez usuarios de este tipo de espacios son autónomos. La mayoría de los que escogen esta fórmula lo hacen porque quieren dar una imagen más profesional de cara a sus clientes. Por otra parte, de cara a Hacienda, es como si alquilásemos un local, por tanto, podemos desgravarnos el pago de las mensualidades en el IRPF y también deducirnos el IVA. ¿Más ventajas? Los centros de coworking ofrecen incluido en el precio servicios como internet, luz, zonas de descanso y… ¡hasta café gratis!

3.-Bonificaciones de la Seguridad Social

Muchos autónomos que inician su actividad se han beneficiado de la famosa tarifa de 50 euros (sí, ahora de 60€), pero no hay que olvidar que si llevamos dos años sin estar dados de alta como trabajadores por cuenta propia también podemos acogernos a esta cuota. Es importante informarse de las bonificaciones que ofrece la Administración a los distintos colectivos autónomos porque de esta forma podríamos ver reducida la cuota. Igualmente si se pertenece a alguno de estos grupos que tienen bonificaciones; jóvenes (mujeres menores de 35 y los hombres menores de 30), autónomos colaboradores, discapacitados, autónomos que residan o ejerzan su actividad en Ceuta o Melilla, trabajos relacionados con la venta ambulante y a domicilio, pluriempleo y mayores de 65.

También están contempladas bonificaciones para la baja por maternidad, paternidad, adopción, acogimiento, riesgo durante el embarazo o durante la lactancia natural.

5.- Productos de ahorro para autónomos

Los planes de ahorro privado son un instrumento clave para el trabajador autónomo. Este tipo de productos son muy útiles de cara a solucionar un imprevisto futuro, dejar de preocuparse por los estudios de los niños, reformar o comprar una vivienda o algo más sencillo: hacer ese viaje soñado.

Se trata de los PIAS (Planes Individuales de Ahorro Sistemático) que, a pesar de su nombre poco sugerente, es algo que puede resultar muy interesante. Se trata de planes de ahorro periódico. Imaginemos una hucha en la que todos los meses metemos dinero, esa hucha se va llenando y podemos recuperar el capital en forma de renta el día de mañana. Una renta de por vida que complemente la jubilación, que nos permita hacer ese viaje soñado, celebrar por todo lo alto las bodas de plata u organizar la boda de los hijos. Los PIAS son además seguros de vida, y tienen importantes ventajas fiscales. Además, en AXA, ofrecen un bono de fidelización del 5% al contratar un PIAS Futuro o un Plan de Ahorro Gestión.

Para aquellos que buscan un producto más sencillo y que les permita ahorrar sin darse cuenta, un producto interesante es el Plan de Ahorro Ticket, en el cual se pueden hacer aportaciones a partir de solo 30 euros al mes.

Y es que, aunque a veces creamos que no, ahorrar está al alcance de todos. Basta con disponer de la información necesaria y si somos de los que no nos podemos resistir y cada vez que vemos el cerdito medio lleno salimos a buscar un martillo, tendremos que pensar en que un plan de ahorro nos hará la vida más fácil.

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